No es un secreto, si comemos bien somos capaces de sentirnos mejor. Sufrir ansiedad puede conducirnos a comer más y peor. Pero se puede solucionar con buenos hábitos alimentarios.
Hábitos alimentarios para librarte de la ansiedad
Sin embargo, dándole la vuelta a esta idea, también podemos basarnos en la propia alimentación para alejar el mal rollo, ese estrés y ese estado de ánimo que tan poco nos favorece.
Tenemos claro que hay
hábitos alimentarios que te ayudan a librarte de la ansiedad, y como no la queremos para nada en nuestro estilo de vida, aquí os las hemos preparado.
¿Cómo se manifiesta la ansiedad?
Si sufres de ansiedad o tienes cerca a alguien que lo sufre, sabrás que esa sensación se manifiesta de múltiples formas. Nervios, medios descontrolados, digestiones difíciles…
Muy al contrario de lo que se debería hacer, muchos recurren a comer de forma compulsiva o de forma desordenada, haciendo que cada vez el problema sea peor.
Sobre todo porque comer normalmente nos relaja, y hace que nos calmemos pero a la postre si no se hace bien, puede causar más problemas que beneficios.
Sobrepeso, sensación de culpabilidad y digestiones complicadas. Son algunos síntomas, pero hay muchos más.
¿Cómo afecta la dieta o la alimentación al estrés?
Afecta de múltiples formas, por eso una de las mejores formas de atacar de frente el problema es siguiendo una dieta equilibrada.
Sigue estos 5 hábitos para librarte del estrés:
- Los azúcares no son buenos por eso cuantos menos consumas, mejor.
- Menos comida, más ligera y menos copiosa. En lugar de comer 3 veces al día, reparte la comida en más veces. Es mejor comer con regularidad que atiborrarse en la comida. Los médicos dicen que lo ideal son las 5 comidas al día.
- La grasa está permitida (si es de la buena). Sin pasarnos hay muchos alimentos que contienen grasas que si nos podemos permitir, por ejemplo, el salmón.
- Da jaque mate al café y todos los alimentos que lleven cafeína.
- ¿Sabes que los alimentos de alta densidad nutritiva sacian más? En este grupo están los lácteos, las frutas y verduras, cereales, aceites vegetales o los frutos secos.
Y si además mueves el cuerpo con un poco de deporte, fumas menos y reduces el alcohol, ya será para nota.