De una Casa de los 70 a un Rincón Minimalista en Bélgica

Imagina una casa de los años 70 en Diepenbeek, Bélgica, que solía ser todo cerrada y sin apenas luz. Parecía un poco aislada de su propio jardín, ¡una pena! Así es como los chicos de BOT architektuurcollectief la describieron antes de meter sus manos en el proyecto. Pero espera a ver lo que hicieron.



Esta casa de 164 m2 se encuentra en una esquina, justo al borde de un típico huerto flamenco en Diepenbeek, cerca de la reserva natural De Dijken. La ubicación del terreno limitó lo que podían hacer, ya que no querían tocar ese hermoso jardín. Así que se pusieron creativos.

El cambio fue asombroso. Ahora es una casa moderna, bañada por la luz natural y con vistas preciosas. La ubicación en la esquina es perfecta, con vistas a la confluencia de los ríos Stiemerbeek y Kaatsbeek con el Demer. El jardín se mantiene igual, fusionándose con el paisaje circundante.




Todo el exterior con ladrillo visto y espacios abiertos/ Colectivo de arquitectura BOT - Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Todo el exterior con ladrillo visto y espacios abiertos/ Colectivo de arquitectura BOT – Fotógrafo: Jeroen Verrecht

A pesar de toda la transformación, mantuvieron la estructura original: sótano, área de estar, dormitorios y hasta un altillo versátil. El cambio más notable es en el corazón de la casa, donde antes había una cocina oscura, ahora hay un patio lleno de luz.

Este patio no solo ilumina la casa, sino que conecta de manera única el baño con la sala de estar, dándole a esta última una doble perspectiva. Y no podemos olvidarnos de la escalera central, coronada con un tragaluz circular que difunde la luz de manera espectacular.




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Puedes observar la combinación de paredes lisas y ladrillo visto, junto con el aire por conductos vistos de estilo industrial/ Colectivo de arquitectura BOT – Fotógrafo: Jeroen Verrecht

La fachada oeste tiene enormes ventanas que te hacen sentir que estás en el jardín, pero los otros lados son más discretos para mantener la privacidad y la temperatura. Usaron materiales minimalistas como ladrillos «Veldoven», madera, concreto y zinc.

Destaca el uso de ladrillos de horno de campo, que obtuvieron localmente, marcando divisiones y volúmenes dentro de la casa. Además, todas las nuevas particiones son flexibles, pensando en el futuro y en cómo adaptarse a diferentes ocupantes. Esta casa se mantiene relevante sin importar quién la habite.


Salón minimalista donde predomina el color blanco y grandes ventanales que dan al exterior/ Colectivo de arquitectura BOT - Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Salón minimalista donde predomina el color blanco y grandes ventanales que dan al exterior/ Colectivo de arquitectura BOT – Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Habitación paredes en blanco, detalles del ladrillo visto y con vistas al otro ala de la casa/ Colectivo de arquitectura BOT - Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Habitación paredes en blanco, detalles del ladrillo visto y con vistas al otro ala de la casa/ Colectivo de arquitectura BOT – Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Pared de ladrillo visto que contrasta con el blanco nuclear de las paredes/Colectivo de arquitectura BOT - Fotógrafo: Jeroen Verrecht
Pared de ladrillo visto que contrasta con el blanco nuclear de las paredes/Colectivo de arquitectura BOT – Fotógrafo: Jeroen Verrecht

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